El
Betis sumó tres puntos importantísimos en la lucha por Europa en una jornada en
la que no ganaron ninguno de sus perseguidores y encima le recortó dos puntos
al sexto clasificado. El partido no fue brillante, pero se ganó.
Empezaron
el partido los de Mel con la clara intención de ir de cara a por el rival, pero
el fuelle del equipo duró lo que Nosa tardó en consumir sus fuerzas. El nigeriano
fue el mejor del equipo, afianzándose cada vez más en su juego. Con el bajón
del africano, el resto de jugadores no tomaron la iniciativa para coger la
batuta del juego. Beñat estuvo fallón, impreciso e indolente, y se llevó pitos
de la grada. Las bandas no desbordaban y Mel fue moviendo de posición a los
tres de arriba para ver si desactivaba la defensa del Celta. No fue así y los
gallegos, que sorprendentemente no fueron a por el partido y tomaron una
actitud conservadora, a punto estuvieron de marcar por medio de Aspas, pero su
chut fue respondido con una gran parada por parte de Adrián. Le anularon dos
goles al Betis en la primera mitad, uno de ellos legal.
Tras el
descanso más de lo mismo. Los béticos no eran capaces de desbordar con claridad
a los celtistas. Mel dio entrada a Salva Sevilla y Vadillo para desequilibrar
el encuentro, pero la jugada que dio lugar al gol de la victoria tuvo otros
protagonistas. Chica centró desde la banda para que Rubén Castro, aprovechándose
del resbalón de un defensa, rematara a placer el envío del lateral catalán.
Llegaron después unos cuantos contragolpes desaprovechados por el Betis por la
impaciencia a la hora de ejecutarlos por parte de los verdiblancos. El Celta se
fue a por todas y Adrián tuvo que lucirse tras un cabezazo de Augusto. En gol
acabó una falta lateral magistralmente rematada por Túñez, pero el linier
señaló un fuera de juego que, afortunadamente para el Betis, él sólo vio. Y así
acabó el partido, con balones colgados al área bética que no cuajaron pero que
llevaron el nerviosismo a las gradas del Villamarín.
Con
esta victoria, las puertas de la Europa League se han abierto de par en par.
Sólo queda cruzarlas, sólo quedan unos metros, pero hay que andarlos con
cuidado, sobre todo, porque el depósito de gasolina está en la reserva.
LO MEJOR: la victoria, evidentemente, y las
buenas sensaciones que va dejando Nosa últimamente.
LO PEOR: la poca gasolina que le queda al equipo.
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