El colmo de la cobardía

Ayer por la tarde me llama mi hermano y me dice que entre urgentemente en El Desmarque porque, alguien que firmaba con mi nombre y el primero de mis apellidos, había escrito un par de comentarios en dos noticias. La sorpresa fue mayúscula. En uno se criticaba infundadamente a Gordillo y en otro se defendía la labor de Oliver.

Salvo cuando lo hacía con el pseudónimo de oncejota, siempre he firmado mis comentarios y artículos en diversas webs con mi nombre y mis apellidos, dando incluso mi número de socio del Real Betis. Nunca imaginé que alguien llegara al extremo de utilizar mi nombre para hacer comentarios. El que lo ha hecho me está dando una importancia que ni merezco, ni tengo, ni deseo. Yo soy un simple aficionado del Betis. Un socio que lo único que hace es escribir lo que piensa. Ni verdades ni mentiras. Sólo escribo mi opinión, mi punto de vista sobre la actualidad del club. No pretendo convencer a nadie con mis escritos. El único que se cree lo que escribo soy yo y no me importa para nada si los demás están de acuerdo o no porque no busco comprensión ni que me doren la píldora. Seguro que mis ideas son compartidas por muchos y también rechazadas por muchos. Es normal y en eso consiste el debate y las opiniones. Escribo por placer, porque me gusta, desde que tengo uso de razón, escribir lo que pienso. Y sólo pretendo eso: dar mi opinión. Y para esto no me escondo en nombres falsos ni en anónimos. Firmo con mi nombre y apellidos y pongo mi foto porque me gusta dar la cara. En las últimas semanas se me han reprochado varias cosas en el blog de alfinaldelapalmera. Que si soy oficialista, que si tengo enchufe, que si soy tibio. Me parece correcto todo esto, aunque no esté de acuerdo y algunas de las acusaciones sean falsas. Yo se lo que es verdad sobre mi y lo que no. Los que escriben aquí, todos salvo alguna excepción, no me conocen personalmente, y atacarme con cosas personales es un error, porque están dando palos de ciego. La crítica, las discrepancias, el cambio de ideas y las distintas opiniones están muy bien y son sanas para la calidad de los blogs. Ahora bien, intentar hacer daño utilizando el nombre de otro para dar opiniones pasa la línea de la decencia y muestra en el que hace esta canallada una cobardía absurda, infantil y demente.

No os doy más la vara porque  quizás esto sólo me interese a mí, pero creo que tenía que ponerlo en conocimiento de todos los que participan y leen mis escritos. Porque una cosa es que no pretenda sentar cátedra y convencer con mis opiniones y otra bien distinta es consentir que mis puntos de vistas y opiniones sean violadas por un cobarde de medio pelo.

P.D: el de la foto soy yo celebrando el gol de Oliveira el la Final de Copa y si, el pelo es verde.

Más cruel imposible

Real Betis Balompié 2 (Dos de Pereira) – Real Sociedad 3 (Agirretxe, Vela e Íñigo Martínez)

El Betis pierde un partido que tuvo momentos de locura, desesperación, esperanza y crueldad, y que acabó con un final sorprendente que supuso un mazazo contundente para todo el beticismo.

Mel, en la rueda de prensa ha dado por hecho su cese. Es la ley del fútbol y los números del equipo no hay quien los aguante. Yo sigo confiando en la labor de Mel, pero nadie está a salvo de una destitución, por mucho que el entrenador del Betis caiga bien en la mayor parte de la afición y que su trabajo haya sido intachable salvo los últimos dos meses. Así es el fútbol y ante eso no se puede hacer nada. Los mejores entrenadores han caído y Mel, que ha sido un gran entrenador en el Betis, no va a ser menos.

Del partido hay que destacar la reacción del equipo con un 0-2 en contra. La primera mitad fue del Betis, si bien la Real pudo poner tierra de por medio con una clara ocasión parada por casto y por un penalti fallado. Aun sin ocasiones claras, el Betis dominaba el partido, pero la segunda mitad cambió para mal. El Betis salió fallón, temeroso y pronto se puso a merced de la Real Sociedad. A quince minutos para el final el 0-2 en el marcador hizo estallar al Villamarín. Llegó entonces la reacción del Betis. Con coraje y orgullo el Betis empató el partido y, los más optimistas, pensábamos en una milagrosa remontada. Pasó que Íñigo Martínez se sacó un chutazo increíble desde más allá del mediocampo para poner el 2-3 definitivo y poner a Mel en la rampa de salida del club.

Así de cruel e injusto es el fútbol. Los malos resultados y la imagen del Betis en los dos últimos meses van a acabar con el trabajo de Mel al frente del Betis. Esperemos que el cambio, si finalmente se produce, sea para el bien del Betis, que en definitiva es lo único que cuenta.

LO MEJOR: la reacción del equipo, que remontó un 0-2.

LO PEOR: todo lo demás.

Los buitres sobre la carroña

Los malos resultados del Betis han puesto en entredicho la continuidad de Mel al frente del banquillo bético. Ocho partidos sin ganar, un solo gol anotado y casi dos meses desde la última victoria son números demoledores y hacen vital para la continuidad de Mel una victoria el domingo frente a la Real Sociedad.

El Betis, aun en la situación económica que está, es un plato de buen gusto para cualquier entrenador que esté en el paro. Y con la crisis de resultado aparecen a escena buitres que quieren repartirse el cadáver de un entrenador cesado. Estas aves carroñeras habitan en distintos paraje: redacciones de periódicos y radios, representantes, entrenadores e incluso aficionados. Todos están esperando a lanzarse a por la carroña, y envían mensajes para que sepa la gente que está sobrevolando el terreno. Para ello, la prensa publican nombres de posibles sustitutos, los representantes ofrecen a sus representados y los aficionados hacen quinielas sobre sus preferidos para relevar a Mel. Todo son noticias y puntos de vistas negativos y que para nada ayudan al Betis. Me dijo un amigo periodista que en la facultad le dijeron que las noticias buenas no eran tan rentables como las malas. Hay que vender lo malo, lo catastrófico.

Yo, sin embargo, soy optimista con respecto a la continuidad del entrenador. Yo no concibo que el Betis pierda el domingo. Confío plenamente en la labor de Mel, en los jugadores y en el fin de la racha negativa de resultados y juego. El año pasado el equipo se sobrepuso de una crisis parecida y esta plantilla está perfectamente capacitada para salir del bache. En el documental “La foto del siglo” sobre los campeones de 1935, dice uno de los protagonistas, que un bético nunca se rinde. Esa es la mentalidad que debemos tener todos. Es un error rendirse ahora. Los números pesan demasiado, pero también las estadísticas dicen que la distancia con respecto al descenso es sólo un punto menor a la que existe con las posiciones europeas.

La ley del fútbol se puede llevar por delante a Pepe Mel. Sería una lástima que el entrenador madrileño no pudiera continuar al frente del Betis. Pero eso no va a ocurrir. Vamos a ganar el domingo y a empezar con una nueva racha de resultados positivos, logrando puntos que nos acerque al objetivo de la temporada. Y eso ocurrirá con Mel de entrenador. Ojala sea así.

Casi dos meses sin ganar

Villarreal 1 (Borja Valero) – Real Betis Balompié 0

Una pérdida de balón de Beñat en el centro del campo, una jugada a la contra, una salida a medias de Casto y un sutil toque de Borja Valero acabaron con un triste Betis, incapaz de lograr algo positivo ante un rival plagado de bajas importantes.

El conjunto de Mel dispuso de casi un 70% de posesión del balón sin que este dominio le sirviera absolutamente para nada. Se encontró el Betis con un rival que renunció a su filosofía de juego y le entregó el balón al conjunto verdiblanco. Pasado los veinte minutos de juego llegó el gol villarrealense, que a final resultó definitivo. El Betis se mostró romo en ataque. En la primera mitad sólo se puede destacar un chut cruzado de Rubén Castro que desvió brillantemente Diego López.

Movió el banquillo Pepe Mel y dio entrada a Matilla en lugar de Iriney para que el Betis creara más juego ofensivo. La intención fue buena pero el resultado nulo. La única ocasión del Betis en la segunda mitad fue un lanzamiento desde mitad del campo de Montero que a punto estuvo de colarse en la portería del Villarreal. Es fantástico que Mel no renuncie a su estilo de juego, pero tener sobre el césped a dos delanteros de metro noventa y no colgar un solo balón es desperdiciar el posible potencial aéreo de Molina y Santa Cruz. Antes de todo esto se produjo un penalti de Gonzalo a Castro que el árbitro no vio. De nada sirve esta excusa, porque jugando sin velocidad, profundidad y chispa es imposible ganar.

Casi dos meses lleva el Betis sin ganar un partido de Liga. Mucho tendrá que cambiar el equipo de Mel para volver a ser el de septiembre. Mucho trabajo le queda al entrenador bético por delante. Y el domingo llega la Real Sociedad, farolillo rojo de la división.

LO MEJOR: pese al error del gol, me quedo con un par de paradas de Casto.

LO PEOR: ocho partidos sin ganar y un solo gol en esos encuentros.

A río revuelto…

El Betis visita el sábado a las seis El Madrigal para enfrentarse a un Villarreal sumido en una situación atípica y para nada esperada por el club castellonense. El equipo de Mel debe aprovechar esa situación para volver a sumar de tres en tres.

La dinámica del equipo amarillo me recuerda mucho a la temporada en la que el Betis disputó la Champions League.  Tras lograr clasificarse en cuarto lugar en la última liga, el Villarreal venció al Odense y accedió a la Liga de Campeones. Las exigencias y las dificultades de un equipo que disputa la máxima competición europea se multiplican y si no se refuerza de manera adecuada, todavía se hace más difícil que el equipo rinda y compita al nivel esperado. El Betis, en verano de 2005, se reforzó con jugadores (Rivera, Miguel Ángel, Óscar López, Nano y Juanlu) sin experiencia internacional y que no daban la talla suficiente para la Champions. El Villarreal ha fichado para este importante año a César, Caamuñas, Zapata y De Guzmán. Pero las coincidencias van más allá. El equipo de Serra sufrió la pérdida por lesión de su hombre gol, Ricardo Oliveira, para toda la temporada; el Villarreal ha sufrido una plaga de lesiones importante que ha afectado a jugadores claves como Rossi, Nilmar, Cani entre otros. Y para terminar con las coincidencias, el Betis y su rival del sábado salieron mal parados del sorteo de la fase de grupos de la Champions. A los verdiblancos les tocaron Chelsea, Liverpool y Anderlecht; a los amarillos Bayern, Nápoles y Manchester City.

Por todo esto y porque siete partidos sin conocer la victoria son muchos, es necesario dar un golpe sobre la mesa en El Madrigal. El Betis, inmerso también en una crisis de resultados, debe aprovechar el mal momento y las urgencias del Villarreal. Ya saben, a río revuelto…

Derroche sin premio

Real Betis Balompié 0 – Málaga C.F. 0
 

Betis y Málaga empataron a cero en un vibrante partido en el que el equipo bético puso fin a su racha de derrotas frente a un rival superior. El equipo de Mel hizo un derroche físico importante y volvió a recordar al de las cuatro victorias, aunque con la pólvora mojada.

El Málaga quiso adueñarse del balón desde primera hora pero el Betis impidió que ese dominio del esférico fuera productivo ejerciendo una gran presión en el centro del campo. Cañas e Iriney estuvieron inmensos en esa labor. Cazorla, al que el culpable de la grave situación económica del Betis desechó por tres millones de euros, marcaba el ritmo del partido. Joaquín, demostrando su clase y elegancia, metía el miedo en el cuerpo a los béticos con sus arrancadas, pero de nada sirvió, puesto que las mejores ocasiones de la primera mitad fueron para el Betis. Rubén Castro y Mathijsen en propia puerta estuvieron cerca de adelantar a los verdiblancos antes del descanso.

La segunda mitad se convirtió, desde primera hora, en un peligroso intercambio de golpes. Empezó el Betis atacando la portería rival con buenas acciones de Pozuelo, que cada día da muestras inequívocas de poder ser titular en este Betis. Se sacudió el Málaga el dominio bético y los de Pellegrini se hicieron con el control del partido. Llegaron las ocasiones de Rondón, Joaquín y Cazorla, siempre respondidas por magníficas intervenciones de Casto, que estuvo atentísimo no sólo a los disparos rivales sino también a la adelantada defensa bética. Consiguió el Betis zafarse del agobio malagueño y respondió el equipo de Mel con coraje y amor propio para intentar llevarse el partido. Sólo la falta de acierto en los metros finales privó al Betis de agobiar más la portería de Caballero.

Y así se llegó el final, con un empate justo y con un Betis que pone fin a su negativa dinámica. Los quince días que quedan para el partido de Villarreal deben servir para poner al equipo más a tono, recuperar a los lesionados y cargar las pilas para volver a dar la imagen de equipo veloz, agresivo en la presión y eficaz arriba que llevaron al Betis a las victorias de principios de Liga.

LO MEJOR: la intensidad en la presión, las ganas de ganar y la pelea por cada balón.

LO PEOR: un clásico en este apartado: los ultras de uno y otro equipo. Insultos, lanzamientos de botellas y asientos… un lujo de personas.