lunes, 26 de marzo de 2012

El Betis no sabe ganar

Real Betis Balompié 1 (Santa Cruz) – Racing de Santander 1 (Stuani)

El Betis sigue empeñado en no dar un golpe definitivo sobre la mesa que lo mantenga un año más en Primera. Frente al Racing ha desaprovechado otra oportunidad más de poner más tierra de por medio entre el descenso y su posición en la tabla.

En fútbol (y en la vida) las oportunidades que pasan nunca vuelven. Los de Mel han tenido múltiples ocasiones de gol para finiquitar el encuentro y no lo han hecho, pagándolo al final. No es que haya sido el partido un derroche de buen juego, pero si que lo tenía bajo control. Máxime cuando Santa Cruz adelantó a los béticos antes del minuto veinte de juego. El Racing ofrecía muy poquito, pero el Betis fallando ocasiones y Mel errando en los cambios ha permitido que los cántabros terminaran empatando. Los fallos de cara a gol de los béticos han tenido una clave común: el exceso de egoísmo a la hora de finalizar la jugada. Se han empeñado los jugadores del Betis en terminar ellos la jugada en lugar de buscar a un compañero mejor colocado. El tópico del fútbol que dice que el que perdona termina pagándolo se cumplió en el Villamarín. Por los fallos de los jugadores y los de Mel. Con Beñat fundido, debió el técnico introducir más jugadores en el centro del campo que controlarán la posesión del balón. Optó sin embargo por el cambio lógico de fichas los que entraron no mejoraron a los sustituidos. El Racing aprovechó todo esto y, tras unos tiros lejanos que crearon cierto peligro, lograron empatar tras un centro desde la izquierda que Stuani cabeceó a gol. No fue capaza el Betis de reaccionar en los más de diez minutos que aun quedaban y volaron dos puntos importantísimos de Heliópolis.

De seis puntos posibles el Betis ha ganado dos en apenas tres días y jugando los dos partidos como local. La diferencia con respecto al descenso sigue siendo de siete puntos, pero se han dejado pasar oportunidades para sellar la permanencia. Y ahora el calendario se complica. A sufrir, para no perder la costumbre.

LO MEJOR: el gol de Santa Cruz.
LO PEOR: los cambios de Mel y las ocasiones desaprovechadas.

viernes, 23 de marzo de 2012

Malísimo pero un punto más lejos

Real Betis Balompié 1 (Rubén Castro) – R. C. D. Espanyol 1 (Pandiani)

El Betis y el Espanyol firmaron tablas en un mal partido que, pese a todo, aleja un punto más a los verdiblancos de la zona de descenso. Los de Mel suman ya cinco partidos sin conocer la victoria y van dejando escapar oportunidades para certificar definitivamente la permanencia en Primera División.
Como he dicho, el partido fue malo. El juego del Betis sigue apagado, sin chispa, muy superficial y lento. Es la tónica general de los últimos encuentros, exceptuando el del Real Madrid. El fútbol es un juego de centrocampistas y en esa zona, los verdiblancos no crearon nada que se le parezca al fútbol. Beñat estuvo desaparecido por completo y Juanma sigue sin aportar cosas cuando sale de titular. A esto hay que unirle la nula aportación de los delanteros, que no crean apenas ocasiones de gol. Por el contrario, el rival de ayer tenía las ideas más claras pero tampoco hizo más que el Betis para ganar el partido. Movía el balón con más soltura y creaba algo de peligro, pero sin mostrarse lo suficientemente autoritario como para llevarse los tres puntos. Y aun así, con el encuentro tan rácano y malo que disputó el Betis, estuvo a punto de ganar. A diez minutos del final Rubén Castro cabeceó a la red un pase de Pereira. Poco después Salva Sevilla pudo sentenciar el partido pero mandó el balón a las nubes. Y cuando el encuentro agonizaba, Pandiani aprovechó una acción de chiste del Betis para fusilar a Fabricio. La jugada empezó con una pérdida de balón de Pozuelo en el centro del campo. Recuperó el esférico el Espanyol, que lo mandó al vértice derecho del área bética y, allí, Montero y Nélson no se entendieron y chocaron al intentar los dos despejar, quedando la pelota a merced de Pandiani, que no desaprovechó el regalo bético.
El domingo estos fallos no se pueden permitir porque puede costarle al equipo carísimo. El domingo tiene el Betis la oportunidad de distanciarse casi de manera definitiva del descenso. Para que esto ocurra la actitud debe ser otra. Las ganas, el coraje y el amor propio deben multiplicarse por mil. El domingo se juega el Betis el 99% de la temporada. Que recuerden aquello del sentir, luchar, ganar…podemos.

LO MEJOR: que el descenso se aleja un punto más.
LO PEOR: el juego del equipo y la jugada del gol espanyolista.

domingo, 18 de marzo de 2012

Derrotados por un equipo

Rayo Vallecano 3 (Armenteros, Diego Costa y Tamudo) – Real Betis Balompié 0

Se presentó el Betis en Vallecas con la intención de ganar tras tres jornadas sin hacerlo y para iniciar una semana en la que disputará tres partidos que decidirán el devenir de la temporada. Pues la primera en la frente. Derrota abultada, justa y con una imagen paupérrima.

Desde primer momento se observó que el partido iba a ser feo. La poca vistosidad del partido no es excusa para que el equipo de Mel no haya realizado ni un solo tiro a puerta en los más de noventa minutos de juego. Un intento de vaselina de Molina y un fallido remate de cabeza de Santa Cruz fue lo más peligroso en ataque de un pésimo Betis. Se llegó al descanso con el marcador inicial y con la esperanza de ver algo más interesante en la reanudación. Pero los que pusieron las ganas, el empeño, las ocasiones y los goles fueron los rayistas. Armenteros se aprovechó de una mala acción defensiva bética para adelantar a los de Sandoval. El Betis no reaccionó y los cambios no tuvieron el efecto revulsivo necesario. A veinte minutos del final, Diego Costa cabeceó una falta lateral para poner más complicado el encuentro, y Tamudo, casi al final, puso el 3-0 definitivo.

Lamentable partido del Betis, que no fue capaz de jugar con la intensidad, la motivación y la ambición del pasado sábado. Eso dice muy poco del carácter de los jugadores béticos. Muy al contrario que sus rivales de hoy, que saben a lo que juegan en cada segundo del partido y rentabilizan sus armas a la perfección. Y ahora a pasar fatiguitas con dos partidos trascendentales que hay que ganarlos como sea. Veremos.

 
LO MEJOR: una parada de Fabricio en la primera mitad.
LO PEOR: en general la imagen ofrecida, y en particular no chutar entre los tres palos en todo el partido.

domingo, 11 de marzo de 2012

Y Ramos hizo de Casillas

Real Betis Balompié 2 (Molina y Montero) – Real Madrid 3 (Higuaín y dos de Cristiano)

Betis y Madrid disputaron un bello e intenso encuentro en un Villamarín lleno hasta la bandera, con un ambientazo espectacular y con polémica final que se resolvió como casi siempre.

Los verdiblancos salieron a jugarle de tú a tú a los de Mourinho. Sin complejos y sin miedos ante el líder, el Betis ofreció su mejor cara y, a los diez minutos, ya mandaba en el marcador gracias a un gol de Molina tras una rápida jugada del ataque bético. Los de Mel tenían el partido controlado, pero eso no es suficiente para para al Real Madrid, que es capaz de montar un contragolpe a una velocidad endiablada. Así llegó el empate. Paulao y Nélson no salieron a tiempo para dejar en fuera de juego a Higuaín que definió con maestría ante Fabricio. Otra muestra del peligro madridista se produjo en la jugada en la que una falta lanzada por Salva Sevilla se topó con el larguero. Tras el rechace del travesaño el Madrid volvió a lanzarse a tumba abierta hacia el área rival. Tan rápida fue, que Iturralde, tratando de seguir la jugada, se lesionó en el intento. Tras el descanso fue el cuarto árbitro el que se hizo cargo de impartir orden. No se imaginaba el debutante que se convertiría en el protagonista principal del final del partido. Antes de los diez minutos de la segunda mitad, el Madrid consiguió adelantarse con un gol de Cristiano Ronaldo y el Betis empató por medio de Montero. El partido era eléctrico, atractivo y vibrante. De nuevo Ronaldo adelantó a los visitantes tras un despeje de Fabricio a poco más de quince minutos para el final. El Betis acusó el golpe y el esfuerzo, pero apretó en los minutos finales para intentar lograr un merecido empate. Pudo llegar si el árbitro hubiera visto unas claras manos de Ramos en la última jugada del partido. No fue así y el encuentro acabó con las justas quejas de los jugadores del Betis.

Por el Villamarín ha pasado el equipo que tiene todas las papeletas para ganar esta liga. Su juego no es tan exquisito y vistoso como el del otro aspirante, pero es más contundente y eficaz. Y si a eso le añadimos la típica ayuda arbitral, dan como resultado el Madrid de esta noche.

LO MEJOR: el partido del Betis, merecedor de, como mínimo, un empate.
LO PEOR: que el grandísimo esfuerzo no tuvo recompensa.  

jueves, 8 de marzo de 2012

Lleno para un milagro

El sábado a las diez, cuando el nefasto Iturralde dé el pitido para que el partido comience, empezaremos a comprobar si el milagro de ganarle al Real Madrid es posible. Y es que tal y como están las cosas en esta Liga, derrotar al equipo blanco es misión casi imposible.

Antes de que el balón ruede, los béticos ya habremos puesto nuestro particular granito de arena llenado a reventar las gradas del Villamarín, ésas que han visto gestas que parecían inalcanzables pero que se consiguieron bajo el aliento de una afición distinta a las demás. Por aquí pasó el imbatible Chelsea de Mourinho y sucumbió ante los verdiblancos; por aquí pasó el Barcelona de Messi, Xavi, Iniesta y compañía, y un equipo que militaba en Segunda, le dio un baño de categoría; al mismo equipo blaugrana se le remontó un 0-2 con un Edu estelar, en la misma campaña que se le remontó también al Real Madrid para terminar ganando 2-1. Estas son sólo unas muestras de las noches de gloria en Heliópolis. Hay muchas más, muchas que los más antiguos contarían al detalle, con la emoción en sus ojos y la cara ilusionada. Pero la que se tendría que producir el sábado parece muy lejana, muy improbable.

Y es que los números del Real Madrid son incontestables. Cierto es que su juego no es tan exquisito como el del Barcelona. El estilo del equipo de Mourinho es otro, y de momento le sirve para tener el título Liga muy cercano. Para contrarrestar el ataque madridista habrá que sudar de lo lindo. No basta con darlo todo, hay que dar más que eso. Tirando de tópicos, hay que disputar cada balón como si fuera el último que fueras a disputar en tu vida. El futbolista que salga con la verdiblanca sobre sus hombros ha de saber que tiene que afrontar el partido como si le fuera la vida en ello. Así y sólo así se le podrá plantar cara al Real Madrid. Ante la velocidad y la contundencia de Cristiano e Higuaín; ante la clase de Xabi Alonso y Kaká; ante la agresividad de Pepe y Ramos; ante las paradas imposibles de Iker Casilla; ante todo esto, sacrificio, entrega máxima, coraje, pundonor y una miradita a las abarrotadas gradas para saber que los más de cincuenta mil que ven el fútbol desde la barrera sueñan con celebrar una épica victoria cuando el sábado deje de ser tal y sólo queden tres domingos por delante para que salga La Borriquita.

Soñar es gratis y a los béticos no nos queda otra alternativa que pensar en la utopía de derrotar al todopoderoso Real Madrid. Ganas que no falten y si al final se pierde, que nos podamos ir a casa con la cabeza bien erguida.

lunes, 5 de marzo de 2012

A seguir mirando para abajo

Levante 3 (Barkero, Torres y Koné) – Real Betis Balompié 1 (Jorge Molina)

El Betis perdió con total merecimiento en el encuentro que cerraba la jornada 26, disputado en el Ciutat de València. Ser superior al rival en la posesión de balón no sirvió absolutamente para nada. El planteamiento del partido fue un error. Ante un equipo que juega descaradamente al contragolpe hay que jugarle de otra forma. Quizás ofreciéndole el balón al rival para ver qué son capaces de hacer y si se encuentran más incómodos así. Pero Mel es fiel a su estilo, y si no lo cambia en el Camp Nou no es lógico cambiarlo frente al Levante.

Y es que el partido parecía tenerlo bajo control el equipo de Mel, con un Montero que desbordaba con facilidad pero que no acababa bien las jugadas que empezaba. El Betis tocaba y tocaba esperando a que el rival le concediera un hueco por el que poder entrar, cosa que no ocurrió. Lo que si pasó es que una falta en la frontal la aprovechó Barkero para hacer el primero. No se habían repuesto los verdiblancos del primer gol granota cuando llegó el segundo tras una buena jugada entre Barkero, Juanfran y Xavi Torres. El Levante tenía al Betis noqueado pero, en una jugada en la que nadie acertó a despejar el balón, éste le llegó a Molina para que batiera a Munúa. El gol le daba al Betis la oportunidad de meterse de lleno en el partido, pero ese chance duró cinco minutos, los que tardó el Levante en organizar un contragolpe que Koné resolvió ante Fabricio. Los cuarenta minutos restantes de poco sirvieron. El Betis no tuvo jamás la profundidad y la velocidad necesaria para tratar de remontar el adverso resultado. Ya muy al final Castro, Molina y Santa Cruz tuvieron tres ocasiones de gol que no aprovecharon por diversos motivos.

El Levante ha dejado bien claro al Betis cuál es su verdadero y único objetivo. Este partido era clave para saber si el conjunto bético se podía permitir el lujo de soñar con los puestos nobles. La respuesta es contundente y las miras deben dirigirse exclusivamente a los veinticuatro puntos que tiene el Racing de Santander. Así de sencillo.

LO MEJOR: que queda una jornada menos para el final y la distancia con el descenso es la misma.

LO PEOR: el planteamiento del partido.